¿Qué relación existe entre una carta astrológica y el tablero usado por el sacerdote de Ifá?




¿Qué relación existe entre una carta astrológica y el tablero usado por el sacerdote de Ifá? 



¿Ifá y la astrología tienen un origen común?. “Como arriba es abajo y como abajo es arriba” es un principio fundamental que rige en la ley universal, este principio permite al hombre relacionar el macrocosmos con el microcosmos, es decir, que a cada movimiento del cielo astrológico, le corresponde un movimiento de similar naturaleza en el hombre. Esta correspondencia es la base esencial de la astrología, la cual ante la imposibilidad temprana del hombre de manejar lo tridimensional, creó una carta bidimensional a modo de espejo celeste, este mapa refleja el movimiento de los planetas, luminarias , asteroides y la interacción entre ellos. 

El sistema astrológico que se conoce hoy  en día y cuyo origen se le atribuye  a los asirios, babilonios y sus iniciados los caldeos, nos describe un círculo de sistema geocéntrico y basado en el movimiento aparente del Sol, el cual permite anotar en una circunferencia, los movimientos de los planetas y su posición relativa (visto el sol desde la tierra). Estos 360° de la circunferencia están divididos en 12 sectores de 30°, que corresponden a los signos zodiacales, también posee otros 12 sectores llamados casas astrológicas con características particulares cada una. Además,  la carta astrológica tiene dos ejes que dividen a la carta natal en 4 sectores, uno es el eje ascendente descendente. El segundo eje es llamado del poder y sus extremos son el Zenit y el Nadir, este eje se suele llamar en términos astrológicos medio cielo - fondo del cielo respectivamente. No obstante de que los dos ejes (poder y conciencia), están representados en un sistema bidimensional, se entiende que en un sistema tridimensional, uno corresponde a la tangente con la curvatura de la tierra en un determinado punto y el otro a la perpendicular en ese mismo punto. 

El Oráculo de la religión yoruba denominado Ifá, se expresa a través de 256 signos, nacidos de la combinación de los primeros 16 signos llamados mellis. Para anotar estos signos se utiliza el llamado Atepón u Opón de Ifá, este instrumento de madera es una circunferencia similar a la carta astrológica. El Atepón de Ifá está marcado en cuatro extremos con diferentes símbolos, estas marcas son equidistantes entre sí y son llamados los cuatro puntos cardinales de Ifá, esta denominación ha llevado erróneamente a pensar a muchos sacerdotes de Ifá, que el Opón tiene un Norte y un Sur, en contraposición al Este y Oeste que efectivamente si tiene. Hasta ahora los orígenes del sistema adivinatorio de Ifá se pierden en la noche de los tiempos, no está muy claro su origen, pero las analogías del tablero de Ifá con las de la carta astrológica son asombrosas, sin embargo debemos de partir de dos premisas para hacer estas comparaciones. La primera es aceptar que Ifá es un sistema de divinización de la astrología, es decir un proceso similar por el que pasaron otras civilizaciones, como los babilonios, caldeos, griegos y muchos pueblos de la antigüedad. 

Después de aceptar que los Orichas son los astros y los astros son los Orichas, podremos analizar la herramienta base en el oráculo de Ifá. El Opón tiene al igual que la carta astrológica, dos ejes esenciales (poder y conciencia), estos ejes representan en la religión yoruba los dos centros de gravedad que conviven en el hombre y donde se asientan las ceremonias de Osha e Ifá respectivamente. Los llamados 4 arqueros de Ifá marcados en el Opón, representan los 2 ejes esenciales de la carta astral, solo que expresados en 120° mas que en el mapa natal y que resultan de la inclinación del eje terrestre y el movimiento aparente del Sol, luego están los restantes 12 signos (mellis), que representan los doce signos del zodíaco, cada uno con su sector de 30°. La lectura que hacemos los astrólogos de los grados en un signo zodiacal determinado, el sacerdote de Ifá lo determina mediante el Opkele y/o las semillas sagradas en el tablero. El tránsito de los planetas y los aspectos plasmados en un mapa natal, Ifá los refleja en el Atepón con los signos y los revela a través de un Itá (interpretación religiosa del sacerdote de Ifá), solo que no se le llama a los planetas por su nombre, sino con el nombre de los Orichas, ejemplo  Oshún en vez de Venus, Ogún por Marte, Orula y no Saturno etc. Resulta una prueba asombrosa. 

Aunque el sistema de expresión de ambos sistemas adivinatorios es diferente, ambos instrumentos son un espejo del cielo, funcionan bajo un mismo principio y se sustentan en el hecho estadístico. Finalmente quiero expresar que es muy posible que Ifá, de alguna manera con el tiempo haya perdido la esencia original del sistema astrológico en el cual estaba basado, para convertirse solo en unos versos que describen a una sociedad en particular (los yoruba) y que en el lugar donde se asentó la diáspora yoruba, reflejen el carácter y la cultura del cubano. Como dije anteriormente Ifá está basado en el hecho estadístico y los tránsitos planetarios en el cielo, los cuales son aceptados en la religión yoruba como dictados de los Orichas, pero estos tránsitos de los planetas, no pueden ser iguales para todos, por eso aunque el tránsito de Saturno (habla Orunmila) nos marque nuestro destino, este dependerá mucho de las condiciones, geográficas, sociales y hasta ambientales donde nos desarrollemos, por eso son válidos los textos de ambos lados del Atlántico, pero no todo está dicho en los 256 signos de Ifá veremos que pasa cuando otros países adopten el sistema adivinatorio de Ifá, el cual fue declarado por la UNESCO “patrimonio de la humanidad” en el 2005. 

Los que estudiamos astrología, sabemos que la próxima era astrológica corresponde a Capricornio, región del cielo que corresponde a Orunmila .



Saludos – te invito al grupo Astrologia y Los Orishas


Seas parte de nuestro grupo / Join our Group
  


Comments

Popular posts from this blog

Cómo contactar y conectarse con su guía espiritual

Temas de Santeria - 23 de Mayo del 2018

Baño simple y potente con okra (Quimbombo)